El arte del pensar, reflexionar,
crear o imaginar, es,
verdadero prestigio mental.
Algunos se inspiran con la música,
arte ajeno, concentración, estado de ánimo,
amor, miedo o los caminos en solitario.
Yo La veo como una escultura tallada en hielo,
un lienzo de colores imperceptibles,
una novela escrita en letra cursiva,
algo peculiar en lo que cabe,
un grito de auxilio del cerebro,
la llama de una vela por consumirse,
hielo convertido en linda nieve,
una joven que te susurra al oído,
cada una de las letras del corazón,
notas de un piano por componer,
esperando ser escritas para,
algún músico sorprender.
Yo escribo por placer,
cuan la inspiración en forma de la,
Joven de hielo,
me atormenta en su mirada.
Inspiración, amiga del escritor,
te dedico estos versos,
por a tu gran labor.
- Leo Diago